Potenciar una eficiente gestión judicial mediante la aplicación de buenas prácticas, que contribuyan a reducir los tiempos de respuesta a las personas usuarias mediante la eliminación del uso del papel, impresiones y fotocopias innecesarias, ya sea a través del uso de recursos tecnológicos o sin ellos.

1. Propiciar campañas de sensibilización y capacitación dirigidas al personal judicial y personas usuarias, acerca de la importancia de erradicar el consumo de papel y las fotocopias.
2. Informar al personal judicial y las personas usuarias, la lista y funcionalidad de todas las herramientas tecnológicas con que cuenta la Institución, con el fin de motivar su utilización en aquellas oficinas donde se encuentran disponibles, mediante una inducción y seguimiento que genere un óptimo uso de esos recursos, considerando siempre las particularidades de las personas usuarias en cuanto a condiciones de desventaja (brecha tecnológica) y sus condiciones de vulnerabilidad.
3. Conocer, controlar y minimizar las causas que genera la resistencia a introducir mejoras en el servicio que se presta, para lograr una ágil y mejor gestión judicial, mediante el adecuado aprovechamiento de los recursos humanos y tecnológicos disponibles.
4. Promover protocolos o manuales sobre el uso de cada herramienta tecnológica, para potenciar su utilización. Las oficinas y despachos judiciales que no cuentan con herramientas tecnológicas, los protocolos y manuales deberán estar orientados a buscar formas que permitan modificar el modo tradicional de gestionar -apoyado en un uso excesivo de papeles, que no facilitan su análisis y pronta resolución- para avanzar hacia la oralidad, diseño y rediseño de procesos, eliminación de tiempos muertos, fases especializadas de tramitación, entre otras.
5. Fomentar la accesibilidad a los recursos tecnológicos para toda la población judicial y para las personas usuarias, con especial atención aquellas en condición vulnerable.
6. Incorporar como un eje temático dentro de los Planes Anuales Operativos, las acciones relativas a la disminución o eliminación del uso del papel y fotocopias; y evaluar sus resultados.
7. Contar con un inventario de los formatos y/o formularios impresos, formales e informales que se están utilizando en la gestión judicial, para su sustitución en los casos que sea posible por medios electrónicos; sin perjuicio de considerar aquellas oficinas o despachos, que por falta de herramientas tecnológicas se les permita otros usos.
8. Lograr una efectiva reducción del gasto presupuestario del Poder Judicial, en cuanto al consumo de papel y fotocopias.
9. Divulgar y fomentar a nivel institucional el banco de buenas prácticas, en temas relacionados con la sustitución del uso del papel y fotocopias, mediante cambios y acciones apoyadas o no en la tecnología y la oralidad, que incidan en el mejoramiento del servicio y la agilidad de la gestión judicial.
10. Implementar indicadores de costo y consumo, que permitan conocer y cuantificar los avances que se logren en cuanto a la reducción del consumo de papel y fotocopias.
11. Mejorar la imagen del Poder Judicial de Costa Rica a nivel nacional e internacional en materia de eliminación de consumo de papel y de reducción en la tala de árboles.